Genial Tim Burton
Posted: miércoles, 2 de diciembre de 2009 by Sol in Etiquetas: Tim Burton, Vincent PriceUn corto de Tim Burton donde mezcló al inmortal Vincent Price y la densidad de Poe. La oscura belleza de lo siniestro...
Papelones!
Posted: jueves, 26 de noviembre de 2009 by Sol inTomado textual, con errores y horrores ortograficos. (Me sumo a la cruzada y no uso tildes).
Sexo : Femenino
Edad: 23 Años
Papelón: El otro dia me tome el 85 y senti que un tipo me estaba apoyando mal asi que me di vuelta y le dije:
"flaco, porque no dejas de apoyarme" (el colectivo estaba lleno de gente),
el tipo me miro, saco un papelito, anoto un numero y me dijo
"toma, este es mi telefono, si queres que te garche, llamame a eso de las 22:00 que estoy libre, ah! no te apoye, fue aquel nene que te acaba de rozar sin querer con la mochila"
el tipo se bajo en la proxima parada y me comi el resto del viaje con toda la gente mirandome....
Sexo : Masculino
Edad: 24 Años
Papelón: Trabajo en una empresa que provee servicios de Internet. Me llamo una clienta, y en vez decirle IP FIJA, le dije IP PIJ@.
Le corte!
Sexo : Femenino
Edad: 36 Años
Papelón: Viví en la provincia de San Luis hasta mediados del 2009. Por cuestiones de trabajo me movilizé a Capital Federal.
Tuve que tomar un subte. Cuando llegue a la ventanilla dije "hasta Callao" (ni que tuviesen precios distintos como el colectivo segun la parada). Estuve 2 años para meter la tarjeta en el molinete, ya algunos se reían de eso. Pero estallaron todos de la risa, cuando, como una pelotuda, saque la mano como quien para un colectivo, cuando vi venir al subte.
Sexo : Masculino
Edad: 29 Años
Papelón: Soy locutor en una radio, pasando un especial de musica latina dije Jon SECAGA en vez de Jon Secada.
Llamó todo el mundo a la radio para reirse.
Muy pronto mas papelones!.
Fuente: http://terriblepapelon.blogspot.com
Fe de ratas
Posted: domingo, 22 de noviembre de 2009 by Sol in Etiquetas: Sandro suplemento postmortemEl pasado sábado 21 de noviembre me desperté con ansiedad de leer las noticias del día y de mientras tomar mi desayuno habitual. Voy a mi computadora y bajo la edición digital de Clarín y comienzo a leerla, lo de siempre. Mi sorpresa fue encontrarme con una triste noticia que por un momento creí verídica y al ser admirador de Sandro, sentí una profunda tristeza. Me fui al trabajo con esa incertidumbre y ese dolor de la muerte de un ídolo, confiando en la fuente de información, porque el deber de un diario es informar a la gente y supuestamente debería hacerlo con buena fe. En el trabajo hablando con otras personas termino enterándome que Sandro estaba bien, que ya había sido transplantado y que estaba estable y en recuperación. No creía en esas personas, confiaba mas en lo que había leído en el diario, como siempre confío en todas las informaciones que este matutino brinda. La crisis del país, la delincuencia, la política, los deportes, espectáculos y hasta el horóscopo y el servicio fúnebre, todo figura en ese diario. Cuando por fin encendí la televisión y me encontré con la información de que el gitano estaba bien, sentí una inmensa alegría, pero también una gran decepción hacía el grupo y el diario Clarín. Ya la falta de respeto por dar una primicia no tiene límites, ¿hasta donde se puede confiar en este diario o en una información que este da?. Me da miedo pensar de que ya tienen preparada la tapa para cuando caiga la democracia, de que sube el costo de vida un 10000%, de que Sacachispas gana la copa Libertadores, que le pusieron dos brazos a Clemente o que quizás ya tienen anunciada la muerte de algún otro ídolo, o hasta mi propia muerte.
Entonces tomé el teléfono y le di de baja a mi suscripción a ese diario en su edición digital, porque sentí asco y repugnancia por lo que hicieron.
Ahora me planteo muchas cosas, la ley de medios y sus repercusiones, la crisis del campo y hasta la privatización del futbol. No se ya en quien tengo que creer ni que tengo que pensar, me siento esclavo de mi desconfianza y de mis temores. No es que esté a favor de este gobierno o en contra, pero empiezo a entenderlo, yo que pensaba que nunca lo iba a poder entender. Igual hace un tiempo vengo dudando de este diario, sobre todo por el manejo de la información sobre el medio Oriente, ya que conozco dicho lugar y se muy bien como son las cosas. En fin, ustedes son los dueños de lo que leen, pero muchas veces no son dueños de lo que piensan, porque los monopolios mediáticos le lavan la cabeza a la gente y no informan, sino que desinforman. Uno compra una información y la lleva a su cabeza, pero esa información es parte de un negocio de un medio y estos por hacerse su agosto son capaces de cualquier cosa.
Les puedo asegurar que en lo que menos pensaron los monopolios mediáticos cuando salió la ley de medios fue en el pueblo, es evidente que miraron hacia sus bolsillos. Lo que más me duele son los grandes periodistas que trabajan en estos lugares, porque son el futuro de la información en Argentina y tendrían que cuidarse y siempre ser independientes, cueste lo que cueste. Nunca deben permitir que les digan lo que tienen que decir o hacer, porque son el cuarto poder de la república, y tendrían que aprovechar ese beneficio y utilizarlo en pos de un país mejor.
BryanA unos pasos de caer al abismo
A unos segundos de entregarte mi tiempo, allí donde lo que fue y lo que será se confunden...
A palabras de soportar el silencio
A unos pocos besos de entregarte mi respiración
A unos instantes de recordarte para siempre, allí donde el olvido y el dolor conversan...
A centímetros de piel de desnudarme en todas las formas posibles
A caricias de morir entre tus manos, allí donde los cuerpos no alcanzan a satisfacer al amor...
A monedas de comprarte el mundo
A centavos de entregártelo todo, allí donde el egoísmo abandona las espadas sobre la mesa...
A caminos de perder el mapa
A noches de despertar soñándote, allí donde los demás se duermen mientras nosotros jugamos
A puertas del cielo, tal vez quede algún ángel arrodillado ante sus demonios, allí donde los fantasmas juegan a las escondidas y las mentes yacen en blanco...
El gran misterio de la vida es saber si estamos vivos
Nico
Peor que tener miedo a la muerte, es tener miedo a toparse con la vida misma.
Nico
Corrían los años sesenta, entre el hipismo y la sensatez del gobierno de un cordobés llamado Arturo Illia. La ironía que escondía el fuego de aquel sol que amanecía sobre las vías del ferrocarril Urquiza cuya cabecera se ubica en la ciudad de Buenos Aires, Argentina. Un sol que había sido testigo de una gran discusión que terminó en tragedia. Se trataba de una joven pareja que rondaba los treinta años. Él era empleado en la estación Arata de ese ferrocarril, y ella trabajaba como florista en un pequeño puesto frente al cementerio de la Chacarita, lindero a la terminal de dicha estación. Ambos de clase muy baja, luchadores, trabajadores incansables. Tenían proyectos de una vivienda propia, ya que alquilaban un humilde departamento sobre la calle Warnes, a la altura de la avenida Elcano. Nunca nadie había hablado con ellos, solo los veían pasar por la calle, mudos y de la mano. Nadie sabía donde iban ni cuándo regresaban. Se dice de un hombre que trabajaba en un puesto de diarios y revistas de la cuadra, que aseveraba haber presenciado una discusión entre ambos, pero desconocía el motivo y mucho menos intuía lo que pronto sucedería. En medio de la pelea, ella comenzó a correr, enfurecida. Se la notaba fuera de sí y detuvo su carrera sobre las vías. En ese momento, el tren que llegaba a la estación Arata, procedente de General Lemos, no logró frenar su marcha. El maquinista, desesperado y haciendo sonar inútilmente su bocina, fue quien vio por última vez el rostro angustioso pero desafiante de aquella mujer. Esa formación de cuatro vagones arrasó con la vida de ella.
El viudo, inmensamente acongojado, enterró a su mujer en ese enorme cementerio. Cubrió la lápida con todas las flores que habían quedado en el humilde puesto de su difunta esposa. Luego de ese episodio, al viudo nunca más se lo volvió a ver…
Vecinos y algunos trabajadores del barrio aseveran que han visto pasar un tren. A decir verdad un tren muy extraño sobre las vías de la línea Urquiza, fuera del esquema del recorrido habitual. Pudieron observar pasajeros sentados y algunos juran haber visto a la difunta que trabajaba en el puesto de flores de la zona, y que su viudo la esperaba sentado en uno de los asientos de la estación.
Cuenta la leyenda que ese tren pasa cada día a las tres cuarenta y cuatro de la tarde, justo la hora en que sucedió la tragedia. El esquema habitual dice que el tren tendría que pasar diez minutos mas tarde, pero por alguna cuestión extraña este se adelanta siempre.
Muchos dicen que en ese tren viajan aquellos difuntos que aún tenían cuentas que saldar o asuntos pendientes que dejaron antes de morir. Como el caso de la florista que nunca más pudo ver a su marido. Cual sala de espera, los vagones del tren se convierten así en fieles testigos de aquel destino que nunca llegó…
(By Brian y Sol)
¿Por qué será que en las fiestas nos agarra esa nostalgia incómoda pero necesaria? Esos olores que nos recuerdan la comida de la abuela, esas fotos que estaban perdidas en el fondo de un cajón, esas anécdotas de las que uno habla "como si fuera ayer". Es extraño ese gustito a nostalgia, esa somnoliencia del alma, ese montoncito de ternura que acobarda.
En este día del perdón, no sólo extraño a los que ya no están, también extraño cómo eran las personas que amo hace unos años y que el tiempo las ha cambiado. Se me hace que la gente va creciendo y la mirada se va desgastando, se va apagando...Se me hace que los abrazos se van ablandando...Se me hace que la casa es cada vez menos hogar y que los árboles disfrutan menos de la primavera. Se me hace cada vez más intolerable Septiembre...
Pero este es el gustito de la vida, amargo y dulce a la vez, entre el hinojo mojado en sal y la manzana con miel...Capaz que si no fuese por ese gustito amargo, nos distinguiríamos lo dulce de esos momentos que pasan y se van y no vuelven...
Discurso de graduación de Steve Jobs de 1995, Universidad de Stanford
Posted: martes, 7 de julio de 2009 by Sol in Etiquetas: discurso, graduacion, Steve JobsEste discurso no es nuevo, pero vale la pena releerlo. Lo pronunció Steve Jobs, Director Ejecutivo de Apple Computer y Pixar Animation Studios, el 12 de Junio de 2005 en la Ceremonia de Graduación.
Ojalá les sirva.
Tengo el honor de estar hoy aquí con vosotros en vuestra iniciación en una de las mejores universidades del mundo. Nunca me gradué. A decir verdad, esto es lo más cerca que jamás he estado de una graduación universitaria. Hoy os quiero contar tres historias de mi vida. Nada especial. Sólo tres historias.
La primera historia versa sobre cómo se conectan los puntos
Dejé Reed College después de los seis primeros meses, pero después seguí por allí por libre otros 18 meses, más o menos, antes de dejarlo de veras. Entonces, ¿por qué lo dejé?
Comenzó antes de que yo naciera. Mi madre biológica era una titulada universitaria joven y soltera, y decidió darme en adopción. Ella tenía muy claro que quienes me adoptaran tendrían que ser titulados universitarios, de modo que todo se preparó para que fuese adoptado al nacer por un abogado y su mujer. Solo que cuando aparecí decidieron en el último momento que lo que de verdad querían era una niña. Así que mis padres, que estaban en lista de espera, recibieron una llamada a media noche preguntando: “Tenemos un niño no esperado; ¿lo queréis?” “Por supuesto”, dijeron. Mi madre biológica se enteró de que mi madre no tenía titulación universitaria, y que mi padre ni siquiera había terminado el bachillerato, así que se negó a firmar los documentos de adopción. Sólo cedió, meses más tarde, cuando mis padres prometieron que algún día iría a la universidad.
Y 17 años más tarde realmente fui a la universidad. Pero de forma descuidada elegí una universidad que era casi tan cara como Stanford, y todos los ahorros de mis padres de clase trabajadora los estaba gastando en mi matrícula. Después de seis meses, no le veía propósito alguno. No tenía idea de qué quería hacer con mi vida, y menos aún de cómo la universidad me iba a ayudar a averiguarlo. Y me estaba gastando todos los ahorros que mis padres habían conseguido a lo largo de su vida. Así que decidí dejarlo, y confiar en que las cosas saldrían bien. En su momento me dio miedo, pero en retrospectiva fue una de las mejores decisiones que nunca haya tomado. En el momento en que lo dejé, ya no fui más a las clases obligatorias que no me interesaban, y comencé a meterme en las que parecían interesantes.
No era idílico. No tenía dormitorio, así que dormía en el suelo de las habitaciones de mis amigos, devolvía botellas de Coca Cola por los 5 céntimos del depósito para conseguir dinero para comer, y caminaba más de 10 Km los domingos por la noche para comer bien una vez por semana en el templo de los Hare Krishna. Me encantaba. Y muchas cosas con las que me fui topando al seguir mi curiosidad e intuición resultaron no tener precio más adelante.
Os daré un ejemplo: en aquella época el Reed College ofrecía la que quizá fuese la mejor formación en caligrafía del país. En todas partes del campus, todos los póster, todas las etiquetas de todos los cajones, estaban bellamente caligrafiadas a mano. Como ya no estaba matriculado y no tenía clases obligatorias, decidí atender al curso de caligrafía para aprender cómo se hacía. Aprendí cosas sobre el serif y tipografías sans serif, sobre los espacios variables entre combinaciones de letras, sobre qué hace realmente grande a una gran tipografía. Era sutilmente bello, histórica y artísticamente, de una forma que la ciencia no puede capturar, y lo encontré fascinante.
Nada de esto tenía ni la más mínima esperanza de aplicación práctica en mi vida. Pero diez años más tarde, cuando estábamos diseñando el primer ordenador Macintosh, volvió a mí. Y diseñamos el Mac con todo dentro. Fue el primer ordenador con tipografías bellas. Si nunca me hubiera dejado caer por aquél curso concreto en la universidad, el Mac jamás habría tenido múltiples tipografías, ni tipos con espaciado proporcional. Y como Windows no hizo más que copiar el Mac, es probable que ningún ordenador personal los tuviera. Si nunca hubiera decidido dejarlo, no habría entrado en esa clase de caligrafía, y los ordenadores personales no tendrían la maravillosa tipografía que poseen. Por supuesto que era imposible conectar los puntos mirando hacia el futuro cuando estaba en clase. Pero era muy, muy claro al mirar atrás diez años más tarde.
Otra vez: no se pueden conectar los puntos hacia adelante, sólo puedes hacerlo hacia atrás. Así que tenéis que confiar en que los puntos se conectarán alguna vez en el futuro. Tienes que confiar en algo — tu instinto, el destino, la vida, el karma, lo que sea. Esta forma de actuar nunca me ha dejado tirado, y ha marcado la diferencia en mi vida.
Mi segunda historia es sobre el amor y la pérdida
Tuve suerte — supe pronto en mi vida qué era lo que más deseaba hacer. Woz y yo creamos Apple en la cochera de mis padres cuando tenía 20 años. Trabajamos mucho, y en diez años Apple creció de ser sólo nosotros dos a ser una compañía valorada en 2 mil millones de dólares y 4.000 empleados. Hacía justo un año que habíamos lanzado nuestra mejor creación — el Macintosh — un año antes, y hacía poco que había cumplido los 30. Y me despidieron. ¿Cómo te pueden echar de la empresa que tú has creado? Bueno, mientras Apple crecía contratamos a alguien que yo creía muy capacitado para llevar la compañía junto a mí, y durante el primer año, más o menos, las cosas fueron bien. Pero luego nuestra perspectiva del futuro comenzó a divergir, y finalmente nos apartamos completamente. Cuando eso pasó, nuestra Junta Directiva se puso de su parte. Así que a los 30 estaba fuera. Y de forma muy notoria. Lo que había sido el centro de toda mi vida adulta se había ido, y fue devastador.
Realmente no supe qué hacer durante algunos meses. Sentía que había dado de lado a la anterior generación de emprendedores – que había soltado el testigo en el momento en que me lo pasaban. Me reuní con David Packard [de Hewlett Packard] y Bob Noyce [inventor del circuito integrado, Intel], e intenté disculparme por haberla fastidiado tanto. Fue un fracaso muy notorio, e incluso pensé en huir del valle [Silicon Valley]. Pero algo comenzó a abrirse paso en mí — aún amaba lo que hacía. El resultado de los acontecimientos en Apple no había cambiado eso ni un ápice. Había sido rechazado, pero aún estaba enamorado. Así que decidí comenzar de nuevo.
No lo vi así entonces, pero resultó ser que el que me echaran de Apple fue lo mejor que jamás me pudo haber pasado. Había cambiado el peso del éxito por la ligereza de ser de nuevo un principiante, menos seguro de las cosas. Me liberó para entrar en uno de los periodos más creativos de mi vida.
Durante los siguientes cinco años, creé una empresa llamada NeXT, otra llamada Pixar, y me enamoré de una mujer asombrosa que se convertiría después en mi esposa. Pixar llegó a crear el primer largometraje animado por ordenador, Toy Story, y es ahora el estudio de animación más exitoso del mundo. En un notable giro de los acontecimientos, Apple compró NeXT, regresé a Apple, y la tecnología que desarrollamos en NeXT es el corazón del actual renacimiento de Apple. Y Laurene y yo tenemos una maravillosa familia.
Estoy bastante seguro de que nada de esto habría ocurrido si no me hubieran echado de Apple. Creo que fue una medicina horrible, pero supongo que el paciente la necesitaba. A veces, la vida te da en la cabeza con un ladrillo. No perdáis la fe. Estoy convencido de que la única cosa que me mantuvo en marcha fue mi amor por lo que hacía. Tenéis que encontrar qué es lo que amáis. Y esto vale tanto para vuestro trabajo como para vuestros amantes. El trabajo va a llenar gran parte de vuestra vida, y la única forma de estar realmente satisfecho es hacer lo que consideráis un trabajo genial. Y la única forma de tener un trabajo genial es amar lo que hacéis. Si aún no lo habéis encontrado, seguid buscando. No os conforméis. Como en todo lo que tiene que ver con el corazón, lo sabréis cuando lo hayáis encontrado. Y como en todas las relaciones geniales, las cosas mejoran y mejoran según pasan los años. Así que seguid buscando hasta que lo encontréis. No os conforméis.
Mi tercera historia es sobre la muerte
Cuando tenía 17 años, leí una cita que decía algo como: “Si vives cada día como si fuera el último, algún día tendrás razón”. Me marcó, y desde entonces, durante los últimos 33 años, cada mañana me he mirado en el espejo y me he preguntado: “Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy a hacer hoy?” Y si la respuesta era “No” durante demasiados días seguidos, sabía que necesitaba cambiar algo.
Recordar que voy a morir pronto es la herramienta más importante que haya encontrado para ayudarme a tomar las grandes decisiones de mi vida. Porque prácticamente todo — las expectativas de los demás, el orgullo, el miedo al ridículo o al fracaso — se desvanece frente a la muerte, dejando sólo lo que es verdaderamente importante. Recordar que vas a morir es la mejor forma que conozco de evitar la trampa de pensar que tienes algo que perder. Ya estás desnudo. No hay razón para no seguir al corazón.
Hace casi un año me diagnosticaron cáncer. Me hicieron un barrido a las 7:30 de la mañana, y mostraba claramente un tumor en el páncreas. Ni siquiera sabía qué era el páncreas. Los médicos me dijeron que era prácticamente seguro un tipo de cáncer incurable, y que mi esperanza de vida sería de tres a seis meses. Mi médico me aconsejó que me fuese a casa y dejara zanjados mis asuntos, forma médica de decir prepárate a morir. Significa intentar decirle a tus hijos todo lo que ibas a contarles en los próximos diez años en unos pocos meses. Significa asegurarte de que todo queda atado y bien atado, para que sea tan fácil como sea posible para tu familia. Significa decir adiós.
Viví todo un día con ese diagnóstico. Luego, a última hora de la tarde, me hicieron una biopsia, metiéndome un endoscopio por la garganta, a través del estómago y el duodeno, pincharon el páncreas con una aguja para obtener algunas células del tumor. Yo estaba sedado, pero mi esposa, que estaba allí, me dijo que cuando vieron las células al microscopio los médicos comenzaron a llorar porque resultó ser una forma muy rara de cáncer pancreático que se puede curar con cirugía. Me operaron, y ahora estoy bien.
Esto es lo más cerca que he estado de la muerte, y espero que sea lo más cerca que esté de ella durante algunas décadas más. Habiendo vivido esto, ahora os puedo decir esto con más certeza que cuando la muerte era un concepto útil, pero puramente intelectual:
Nadie quiere morir. Ni siquiera la gente que quiere ir al cielo quiere morir para llegar allí. Y sin embargo la muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella. Y así tiene que ser, porque la Muerte es posiblemente el mejor invento de la Vida. Es el agente de cambio de la Vida. Retira lo viejo para hacer sitio a lo nuevo. Ahora mismo lo nuevo sois vosotros, pero dentro de no demasiado tiempo, de forma gradual, os iréis convirtiendo en lo viejo, y seréis apartados. Siento ser tan dramático, pero es bastante cierto.
Vuestro tiempo es limitado, así que no lo gastéis viviendo la vida de otro. No os dejéis atrapar por el dogma — que es vivir según los resultados del pensamiento de otros. No dejéis que el ruido de las opiniones de los demás ahogue vuestra propia voz interior. Y lo más importante, tened el coraje de seguir a vuestro corazón y vuestra intuición. De algún modo ellos ya saben lo que tú realmente quieres ser. Todo lo demás es secundario.
Cuando era joven, había una publicación asombrosa llamada The Whole Earth Catalog [Catálogo de toda la Tierra], una de las biblias de mi generación. La creó un tipo llamado Stewart Brand no lejos de aquí, en Meno Park, y la trajo a la vida con su toque poético. Eran los últimos años 60, antes de los ordenadores personales y la autoedición, así que se hacía con máquinas de escribir, tijeras, y cámaras Polaroid. Era como Google con tapas de cartulina, 35 años de que llegara Google: era idealista, y rebosaba de herramientas claras y grandes conceptos.
Stewart y su equipo sacaron varios números del The Whole Earth Catalog, y cuando llegó su momento, sacaron un último número. Fue a mediados de los 70, y yo tenía vuestra edad. En la contraportada de su último número había una fotografía de una carretera por el campo a primera hora de la mañana, la clase de carretera en la que podrías encontrarte haciendo autoestop si fueseis así de aventureros. Bajo ella estaban las palabras: “Sigue hambriento. Sigue insensato". Era su último mensaje de despedida. Sigue hambriento. Sigue insensato. Y siempre he deseado eso para mí. Y ahora, cuando os graduáis para comenzar de nuevo, os deseo eso.
Seguid hambrientos. Seguid insensatos.
Muchísimas gracias a todos.
(Aquí el video en inglés)
Un poco de historia....
Posted: sábado, 27 de junio de 2009 by Sol inMuro de las Lamentaciones
El Muro de las Lamentaciones (en hebreo, הַכֹּתֶל הַמַעֲרָבִי, Hakótel Hama'araví), o Muro de los Lamentos, es el sitio más sagrado del judaísmo. Su nombre en hebreo significa simplemente "muro occidental." Según la opinión popular, es el último vestigio del Templo de Jerusalén, el edificio más sagrado del judaísmo. Los restos que aún quedan datan de la época de Herodes el Grande, quien mandó construir grandes muros de contención alrededor del Monte Moriá, en el año 37 adc. ampliando la pequeña explanada sobre la cual fueron edificados el Primer y el Segundo Templo de Jerusalén, formando lo que hoy se conoce como la Explanada de las Mezquitas (por la tradición musulmana) o Explanada del Templo (por la tradición judeocristiana).
Historia [editar]
El Primer Templo, o Templo de Salomón, fue construido en el siglo X a. C., y destruido por los babilonios en el 586 a. C. El Segundo Templo, en tanto, fue reconstruido por Esdras y Nehemías en el año 445 adc. a la vuelta del Exilio de Babilonia, y vuelto a destruir por los romanos en el año 70 de nuestra era, durante la Gran Revuelta Judía. De tal modo, cada templo se mantuvo en pie por unos 400 años.
De acuerdo con la historia, cuando las legiones del emperador Vespasiano destruyeron el templo, sólo una parte del muro exterior quedó en pie. El entonces general Tito dejó este muro para que los judíos tuvieran el amargo recuerdo de que Roma había vencido a Judea (de ahí el nombre de Muro de las Lamentaciones). Los judíos, sin embargo, lo atribuyeron a una promesa hecha por Dios, según la cual siempre quedaría en pie al menos una parte del sagrado templo como símbolo de su alianza perpetua con el pueblo judío. Los judíos han rezado frente a este muro durante los últimos dos mil años, creyendo que este es el lugar accesible más sagrado de la Tierra, ya que no pueden acceder al interior de la Explanada de las Mezquitas, que sería el más sagrado de todos. En todo caso, las oraciones hebraicas frente al muro no se limitan a las lamentaciones. Se lee el libro de los Salmos. Se realizan ceremonias de Bar Mitzva. Alabanzas y peticiones (orales y escritas) son comunes y continuas.
Comunmente frente a él se lamenta la destrucción de la ciudad y la dispersión del pueblo hebreo, siendo el viernes un día de especial intensidad. La tradición de introducir un pequeño papel con una plegaria entre las rendijas del muro tiene varios siglos de antigüedad. Entre los rezos de los judíos se incluyen las fervientes súplicas a Dios para que vuelva a la tierra de Israel, el retorno de todos los exiliados judíos, la reconstrucción del templo (el tercero), y la llegada de la era mesiánica con la venida del mesías judío.
El Muro de las Lamentaciones es sagrado para los judíos debido a que es el último trozo del muro que rodeaba el Templo por el sur y por el este. Además, el Muro es el lugar más cercano al sancta sanctorum o lugar santísimo (1Reyes 8:6-8). De las tres secciones del muro, el del este, del sur y del oeste, el del oeste es el lugar tradicional de oración (de ahí su nombre en hebreo, Hakótel Hama'araví, "el Muro Occidental").
En la Explanada de las Mezquitas, rodeada por el Muro, los musulmanes han ido construyendo a lo largo de los siglos la Cúpula de la Roca y la Mezquita de Al-Aqsa.
Tito Flavio Sabino Vespasiano,1 comúnmente conocido como Vespasiano (17 de noviembre de 9 - 23 de junio de 79), fue emperador del Imperio Romano entre el año 69 hasta su muerte, acaecida en 79. Fue el fundador de la Dinastía Flavia, que gobernó el Imperio Romano desde el año 69 hasta 96. Fue sucedido por sus hijos Tito (79 - 81) y Domiciano (81 - 96).
Descendía de una familia del ordo equester que había alcanzado el rango senatorial durante los reinados de los emperadores de la Dinastía Julio-Claudia. Siendo designado cónsul en 51, ganó renombre como comandante militar, destacando en la invasión romana de Britania (43). Comandó las fuerzas romanas que hicieron frente a la rebelión de los judíos del año 66 Cuando se disponía a sitiar Jerusalén, la capital rebelde, el emperador Nerón se suicidó, sumiendo al Imperio en un año de guerras civiles conocido como el Año de los Cuatro Emperadores. Tras la rápida sucesión y fallecimiento de Galba y Otón y el ascenso al poder de Vitelio, los ejércitos de las provincias de Egipto y Judea proclamaron emperador a Vespasiano el 1 de julio de 69 En su camino hacia el trono imperial, Vespasiano se alió con el gobernador de Siria, Cayo Licinio Muciano, quien condujo las tropas de Vespasiano contra Vitelio, mientras el propio Vespasiano tomaba el control sobre Egipto. El 20 de diciembre, Vitelio fue derrotado y al día siguiente Vespasiano fue proclamado emperador por el Senado.
Poca información ha sobrevivido del reinado de Vespasiano tras sus diez años de gobierno. Destaca de su reinado el programa de reformas financieras que promovió, tan necesario tras la caída de la Dinastía Julio-Claudia, su exitosa campaña en Judea y sus ambiciosos proyectos de construcción como el Anfiteatro Flavio, conocido popularmente como el Coliseo Romano. Tras su muerte el 23 de junio de 79 fue sucedido en el trono por su hijo mayor, Tito.
LA ESCUELA PRODUCE UN SABER QUE NO ES RECONOCIDO COMO TAL (Terigi)
Posted: by Sol inPara que la reproducción del saber sea posible, la escuela debe disponer de un saber específico: el saber acerca de la transmisión. ¿Qué diferencia a un docente de un experto en un cierto campo cultural?
Caracterizaremos a los docentes en una doble función de expertos: como expertos en un campo cultural y como expertos en las intervenciones que se requieren para que ese grupo de alumnos puedan comprender ese saber propio de ese campo.
El dispositivo escolar para la transmisión de los saberes genera una instancia colectiva para el aprendizaje y las estrategias didácticas están definidas sobre esa base. Esto significa que el saber didáctico ha sido elaborado durante décadas suponiendo condiciones de organización social propias de la situación colectiva de transmisión del saber.
Por otra parte, la escuela es un lugar donde se produce el saber de la transmisión y los docentes son también productores de este saber. Aunque esto no es reconocido.
Un ejemplo de esto es lo que ocurre en los plurigrados de las escuelas rurales. Los docentes tienen que encontrar un modo de desarrollar contenidos de grados diferentes en condiciones de enseñanza simultánea y que para ello cuentan sólo con un conjunto de propuestas didácticas construidas según la norma graduada de la escolaridad. Se trata de una invención del hacer.
Feldman sostiene que hay dos modos básicos de enfocar el problema de la enseñanza: como proceso interactivo, cara a cara y como sistema institucional. Enfocada la enseñanza como proceso interactivo, la pregunta a la que debe responder la didáctica es ¿cómo enseñar? Enfocada la enseñanza como sistema institucional, la pregunta didáctica cambia, ya no es cómo enseñar, sino cómo ayudar a que muchos otros enseñen en grandes redes institucionales.
Considerar la enseñanza como sistema institucional implica asumir a nivel del sistema de enseñanza la responsabilidad de producir medios de gran escala que ayuden a los docentes a enseñar en las particularidades condiciones en que desarrollan el trabajo de transmisión.
El listado de tareas en que se despliega la función docente no incluye la producción de saber pedagógico, ni su puesta en circulación pública, ni su revisión bajo procedimientos de análisis crítico.
acerca de la imputabilidad en menores
Posted: domingo, 12 de abril de 2009 by Sol inSe considera inimputable a aquella persona que en el momento de cometer el acto delictivo no fue capaz ni de comprender, ni de dirigir sus acciones. Ahora bien, ¿el adolescente en conflicto con la ley penal, tiene acaso noción alguna de estas leyes? ¿Comprende la criminalidad de su acto?
Como psicóloga debo ir más allá de la culpabilidad o inculpabilidad del adolescente en conflicto con la ley penal, sino que me veo obligada a rastrear los motivos que llevaron a este joven a cometer el acto delictivo. Debo entretejer el camino que lo condujo hacia eso, y sumergirme en la verdadera raíz del problema. Un problema que nos acontece a todos, un problema social: un problema que ES NUESTRO PROBLEMA. Ante esto, la sociedad niega este alarmante hecho para mantener su supuesto equilibrio. Entonces, ¿qué ocurre con los negados? ¿Qué ocurre con los que quedan fuera del sistema? ¿Pueden acaso volver? Estas mismas preguntas son las que se plantean los adolescentes internados en los institutos de menores: ¿Cómo tejer un futuro que se presenta vacío de oportunidades? Aquí es donde empieza a jugar como rol determinante la función del psicólogo. Es el psicólogo quien debe funcionar como agente de cambio, como nexo entre el adolescente y la sociedad, es el psicólogo quien “…debe activar la concientización de que existe una población en riesgo, y que ésta no necesita del castigo o de la caridad, sino de un adecuado tratamiento.” Es
este mismo quien debe encontrar al adolescente que yace encerrado detrás de lo que la sociedad etiquetó como “delincuente”
Como lo plantea Basaglia , no se debe reducir al adolescente al acto social cometido. Si tomamos
del discurso jurídico el concepto de peligrosidad, la entendemos como la probabilidad de cometer o volver a cometer un acto delictivo. Ante esto, debemos tener en cuenta que no contamos herramientas desde la ciencia para predecir un comportamiento futuro. Teniendo en cuenta esto, y en relación al artículo expuesto: ¿podemos etiquetar a un adolescente en conflicto con la ley penal de por vida, dando por supuesto que si lo hizo una vez lo volverá a hacer? ¿Acaso está destinado a ser siempre un “delincuente”? Por otra parte, Basaglia considera que una persona peligrosa es aquella que ha sido vulnerada en sus derechos básicos. Si recordamos los derechos del niño, el principio primero establece que: “El niño gozará de una protección especial y dispondrá de oportunidades y servicios, dispensado todo ello por la ley y por otros medios, para que pueda desarrollarse física, mental, moral, espiritual y socialmente en forma saludable y normal, así como en condiciones de libertad y dignidad. Al promulgar leyes con este fin, la consideración
fundamental a que se atenderá será el interés superior del niño.” A partir de lo dicho
¿se prevalece la seguridad del adolescente en conflicto con la ley penal o, por el contrario, se prioriza el objetivo implícito de la sociedad que es asegurarse el control, velando por la seguridad
de “los buenos” y manteniendo encerrados a “los malos”? ¿Es acaso la sociedad, fabricante de “delincuentes” a medida? ¿Es acaso la sociedad quien condena a este adolescente a ser
considerado persona peligrosa y a ser estigmatizado bajo el sello de delincuente? ¿Somos acaso nosotros, en tanto actores de la sociedad, los que ponemos este sello? Ante esto, no debemos olvidar que estos adolescentes forman parte del sistema y son producto de nuestra sociedad, es decir, son “nuestros adolescentes”. Esto nos conduce a tomar conciencia de que estos jóvenes, aún estando en condiciones de privación de su libertad, son menores de edad y que como tal, debe garantizársele el cumplimiento de sus derechos.
Si recordamos las características que estos jóvenes suelen mostrar, vemos adolescentes que cargan a menudo con el rótulo de “delincuentes”, adolescentes cuya mediación simbólica en los actos (delictivos) se ve dificultada, llevando entonces a un actuar impulsivo. Actuar inverso a los dictámenes legales, en consecuencia, sancionables. Para poder alejarnos de aquellos posicionamientos que tienden a la estigmatización y marginalización de estos chicos, al llamado “control social”, debemos adquirir un rol en donde la Institución en su totalidad actúe a favor de escuchar al joven, y, no obstante, de que el propio sujeto utilice la palabra, se responsabilice
incluso de ella. Esto apunta directamente a instaurar la mediación simbólica entre la impulsión del acto (dentro de ellos el acto delictivo, el acto violento, etc). Para alcanzar este logro se debe poner el énfasis en la interdisciplinariedad, donde el trabajo del psicólogo da su aporte crucial, junto al esfuerzo conjugado de los otros profesionales, e incluso de los demás elementos que participan de la Institución, para que se produzca así una intervención a favor la propuesta recién planteada. No sólo se debe acceder a la simple aplicación de sanciones o medios punitivos, sino que se debe buscar de manera eficiente y eficaz la reinserción de estos jóvenes al sistema social, no ya como sujetos que en sus actos “amenazan” la vigencia del pacto social, sino que, habiendo sido intervenidos en el seno de una Institución que procuró su rehabilitación, se inserten ahora como sujetos que puedan asumir plenamente, no solo sus derechos, sino las obligaciones que les competen. Ello implica tener confianza en la palabra, hacerla instrumento (mediación simbólica).
Entonces, a partir de lo expuesto, estamos en condiciones de preguntarnos si bajar la edad de imputabilidad favorece la reinserción de estos jóvenes o, por el contrario, se está apelando al
castigo sin la correspondiente concientización de sus actos. Encerrar a un joven sin que este comprenda la criminalidad de lo que hizo, y sin que este pueda acceder a la mediación simbólica antes de apelar a la acción desmedida, no tiene sentido, ya que sólo se logra que el joven se sienta aún más aislado y más perdido, impidiendo todo tipo de aprendizaje y dejando de lado los ya nombrados derechos del niño.
Para finalizar, quiero hacer mención a una parte del artículo en el cual se afirma que: “La
iniciativa (refiriéndose a bajar la edad de la imputabilidad de menores) (…) establece medidas para "fomentar el sentido de responsabilidad personal y de integración familiar y social del joven". ¿Se puede incentivar la responsabilidad personal, si el joven no tiene las herramientas para tomar conciencia de lo que hizo? ¿Se puede fomentar la integración familiar y social del menor, estando este preso? En otras palabras, las propuestas para reducir la edad penal funcionan como una cortina de humo para que el estado no se sienta obligado a fortalecer las medidas para prevenir la incidencia de conflictos de adolescentes con la ley, ante el hecho innegable de que la reducción real de la criminalidad sólo es posible en la medida que se garanticen plenamente el acceso a servicios de salud y de educación de calidad; que se amplíe la oportunidad de acceder a espacios de recreación, esparcimiento o formación para el trabajo; que el Estado cumpla con la obligación que le marca la Convención de los Derechos del Niño, de desarrollar programas para apoyar a la familia y la comunidad en el cumplimiento de sus funciones referidas a criar y educar a sus hijos en un ambiente de confianza y comprensión.
Decisión
Posted: martes, 10 de marzo de 2009 by Sol in
Lo más importante no es la decisión que tomes, sino el hecho de tomarla. A veces cuesta, más
de lo que a uno le gustaría. Es que muchas veces, detrás de una decisión se aloja un final de ciclo y por supuesto un nuevo comienzo. No conozco mucho la historia del Che Guevara pero el dijo una frase que me quedó: "...como una melancolía partida en dos...", por un lado tenemos todo lo que quedó atrás y que tenemos que dejar ir y por el otro lado tenemos todo lo que está por venir, lo que da miedo, adrenalina, incertidumbre, pero hay que volar, tenemos que desplegar las alas para ver cuan alto y cuan lejos podemos llegar.
Hoy me tocó tomar esa decisión, era lógica, obvia, necesaria para mi pero no la podía ver, no estaba preparada para tomarla...hasta hoy.
Dejar de trabajar en un lugar donde no me valoraban ni me valoraba, donde sólo tenía una pared (literalmente) delante mío, expuesta al maltrato de la gente cada vez más vacía, dejándome acallar por una devastadora rutina que no me exigía ningún desafío, rodeada de disconformidad y con una cara de orto que ni se imaginaban. Me puse un plazo, en julio me marcho, cumplo los 4 años ahí dentro y me marcho ¿para qué? nada más ni nada menos que para perseguir mi sueño (ya más cercano a un proyecto) de preparar mi tesis de doctorado, de seguir dando clases en la UBA, de continuar el profesorado y de hacer todos los posgrados que quiera, DE TRABAJAR DE LO QUE ME GUSTA, LO QUE ME HACE FELIZ. ¿Si tengo miedo? claro que tengo miedo, más allá de la plata, todo cambio conlleva un duelo, pero en este caso, sé que vendrá un renacimiento... Simplemente tengo que aprender a confiar en mi misma, a creérmela pero sin perder la humildad, tengo que tomar noción de que soy psicóloga, que estudié mucho para alcanzar esta meta y ahora, ahora sólo queda volver a empezar.